ARCHIVO AÑO 2004: Jaime Farriol, propietario del Café Palace, se refiere al tradicional local valdiviano

Como un “verdadero lugar de encuentro”, de?ne al Café Palace el propietario del recinto, Jaime Farriol. Y no es para menos, ya que diariamente alrededor de 500 personas se dan cita en el establecimiento, que con el pasar de los años, se ha transformado en punto obligatorio de una buena ‘conversación’.

Sus inicios se remontan a l954, constituyéndose en el Café más antiguo que ha perdurado a través del tiempo. Por aquella fecha el “Palace" —que debe su nombre a un recinto del mismo rubro ubicado en Paris, Francia— tuvo su lugar de origen donde hoy se encuentra la Financiera Atlas (frente a Casa Taboada). Luego del terremoto del 60 se trasladó a Avenida Vicente Pérez Rosales, donde ya lleva 42 años ininterrumpidos de servicio al cliente.

Durante todo este tiempo la leal clientela es algo que ha perdurado: “Siempre ha habido una clientela ?el acá. Ya hay mucha gente que no esté ahora, que ha fallecido, sin embargo las generaciones sucesoras de estas personas aún acuden al Café. Por ejemplo, tengo compañeros míos de la Universidad, que estudiaron acá y que vienen ahora con sus hijos”, comenta Jaime Farriol.


Es más, por muchos años el Palace se transformó en un lugar ‘multifacético’, donde el ambiente cambiaba constantemente con el correr del reloj, tal cual recuerda su propietario: "Aquí venía de todo, agricultores, comerciantes y estudiantes. Hay que pensar que en esos tiempos no habían pubs, ni nada por el estilo; de tal forma que en la mañana era Café, a la 1 era almuerzo, en la tarde once, y en la noche se transformaba en Pub, cosa que ha ido cambiando con el tiempo“.

ANÉCDOTAS Y PERSONAJES

Como todo local con historia, el Palace no puede estar ajeno a las anécdotas y a los comensales ‘famosos’. “Yo recuerdo haber estado conversando con Pablo Neruda cuando era Chico, que son cosas que no se olvidan. También con Pinochet, tomando once e incluso sentados en el bar, y el local rodeado afuera de carros policiales, guardias, escoltas, etc. Asimismo recuerdo haber estado comiendo Paella con el cantante español Dyango cuando estuvo acá”, recuerda Farriol.

TÍPICO CAFÉ

Llama la atención el personal que trabaja en el local, muchos de los cuales han permanecido por largos años, transformándose en una característica del lugar. “Hay una señora que se llama Hilda Romero, que empezó a trabajar acá antes que yo naciera, quien jubiló y siguió trabajando. Me recuerdo de otra persona que trabajo por 50 a?os. Sin embargo este aspecto yo no lo veo Como tradición, cuando cierta gente trabaja y todo funciona bien las cosas se mantienen, yo creo que esa es la razón”, recalca Jaime.

Otra de las características que marcó una época dentro del recinto, fue el ambiente futbolero que se vivió por algunos años, cuando los valdivianos vibraban con el fútbol profesional local y nacional. No sólo se hacían múltiples reuniones ligadas al balompié, sino que también “las mismas radios hacían transmisiones deportivas desde acá, en directo, incluso se traían a los jugadores para hacer diferentes programas. Sin embargo cuando el fútbol murió, murió todo esto”, señala.

Con o sin fútbol, una cosa es cierta, el Café Palace seguirá su marcha habitual, los ya casi 50 años de tradición lo abalan, y el “lugar de encuentro”, de seguro, también seguirá siendo sinónimo de reunión y de buen café.